PICASSO – Y LA PINTURA “LA MUCHACHA DE LA COLA DE CABALLO”


“Un día Picasso me dijo que le encantaba mi cola de caballo y mis mechones de pelo colgando a los costados de mi largo cuello”. Con esa anécdota comienza  la historia del cuadro “Muchacha con cola de caballo” que es la pintura más representativa de ese periodo en las que trabajó con Sylvette Davis como modelo.

Picasso me inspiró el amor por el arte, pero el mayor regalo que me dio fue una llave para abrir puertas en todo el mundo. Es un regalo que llevaré siempre. Dijo la modelo de “La Muchacha de la cola de caballo”

PICASSO – Y LA PINTURA “LA MUCHACHA DE LA COLA DE CABALLO”>

PICASSO – Y LA PINTURA “LA MUCHACHA DE LA COLA DE CABALLO”>

PICASSO – Y LA PINTURA “LA MUCHACHA DE LA COLA DE CABALLO”>


A Sylvette la dibujó, pintó, esculpió, la pensó y la transformó con intensidad en cuarenta obras. El artista se interesó en ella hasta el punto de reclamarla en su estudio por lo menos una vez por semana durante los cuatro meses que duró la temporada. Su rostro, su mirada perdida, su figura joven, llenó los museos y las calles. Y puso de moda en esa época la cola de caballo. Una de las esculturas forma parte de la exposición Mujer en el Museo Picasso de Málaga. Y hay otra una escultura de metal, impresionante, inspirada en ese busto, preside el Greenwich village de Nueva York.

La chica de diecinueve años llamada Sylvette David conoce al artista a  raíz de una visita que hiciera al estudio de Picasso en compañía de su entonces novio, para entregarle las dos sillas que les había comprado. Su novio, también artista, se dedicaba a la escultura y exhibía sus trabajos en las calles de Villauris, Riviera francesa y a Picasso le gustaron esas sillas.

Picasso y la Pintura "La Muchacha de la Cola de Caballo"

Picasso pintaba a la modelo generalmente sin boca. Ella cuenta que la timidez le impedía hablar a pesar de que Picasso hacía todo para entablar familiaridad. Pero en esos cuadros también se nota la influencia de un libro francés para niños, Bécassine, que trataba sobre una niña que no tenía boca, pero era muy inteligente y vivía muchas aventuras.

Los talleres de Picasso y del novio de la modelo estaban tan cerca que bastaba que el artista sacara la mano o la cabeza para que Sylvette supiera que la necesitaba. Y subía a instalarse en la perezosa. El primer cuadro terminado se lo  mostró a través de la ventana del taller cuando ella estaba reunida con unos amigos e hizo alboroto en el grupo.

La relación con su musa de la cola de caballo terminó cuando Picasso se cambió de ciudad para comenzar una nueva relación amorosa. La modelo por su lado después de su divorcio se cambió de nombre a Lydia Corbell. Hoy es una artista plástica exitosa, vive en el campo de Inglaterra y exhibe sus obras en las más renombradas galerías del mundo gracias a la llave mágica que le regaló Picasso.

 

 

Deje su comentario

Logged in as - Log out

.

.

Nombre:

Email:

Comentario: